EL CARDENAL DIO VENTAJAS EN EL CAMPÍN Y AHORA TIENE QUE JUGARSE LA VIDA EN EL METROPOLITANO DE BARRANQUILLA.
En una noche de caos en la ciudad de Bogotá se veían las caras, cardenales y tiburones por la primera semifinal de la Copa Sudamericana, donde el cuadro de Barranquilla dio el primer golpe y ahora tiene que definir la llave en su estadio con su gente.
El ambiente a los alrededores del ‘coloso’ de la 57, era de fiesta, los seguidores cardenales se movilizaron al máximo escenario deportivo de los capitalinos, para seguir soñando con la otra mitad de la gloria.
Pero en la gramilla todo fue distinto, con un Junior con ansias de ganar y un Santa Fe totalmente desconocido, se empezaba a jugar la primera semifinal de la copa. Durante los primeros 45 minutos, fue un juego muy apretado pero un error de Seijas y un gran pase de Jarlan Barrera para que Teo Gutiérrez con una gran definición pusiera el primero de la noche.
Ya para la parte complementaria cambió todo, Santa Fe tomó la iniciativa mientras que Junior se resguardaba en su campo, pero en una jugada de tiro de esquina donde Arley Rodríguez comete un error y es aprovechado por Marlon Piedrahita que manda a guardar el balón al fondo de la red.
El rojo de la capital buscaba el descuento, pero el guardameta del equipo barranquillero fue figura que mantuvo su arco en cero. Mientras que el cardenal terminó el juego con 10 hombres luego de la expulsión de Javier López.
El partido de vuelta será el 29 de noviembre en el Estadio Metropolitano de Barranquilla, donde Santa Fe tendrá que salir a equilibrar la llave para seguir soñando con la otra mitad de la gloria.