No es lo mismo decir que un club es grande a que un equipo es histórico.
En Yorkshire del Oeste se encuentra el estadio Elland Road, casa del Leeds United -equipo que, para algunos, se volvió moda decir que es grande, quizá porque solo lo dirige un loco llamado Bielsa-
Hoy en día consideramos grande al Manchester City, por sus millones y su gran capacidad para fichar casi cualquier jugador del planeta. Pero es que el City no siempre fue así. Con la llegada de la inversión de los árabes, a mediados del 2008, el club inglés se convirtió en uno de los más ricos, se pudo dar el lujo de tener en sus filas a jugadores que años antes habrían sido inimaginables para la afición: Robinho, Tévez, Adebayor, Džeko, Agüero, De Bruyne, entre otros.
Y es que con los árabes también llegaron los títulos: antes de 2008 el conjunto ciudadano había sido campeón solamente en dos ocasiones de la liga inglesa, en cuatro ocasiones de la FA Cup, en dos de la Copa de la Liga y en tres de la Community Shield. Luego del 2008 obtuvieron cuatro títulos más de liga, dos más de FA Cup, cinco más de la Copa de la Liga y tres más de la Community Shield. Además, la única ocasión que ganó un triplete fue en la temporada 2018-2019. La única ocasión en la que llegaron a una final de copa internacional fue en 1969-1970.
El Ledds, por su parte, ha sido campeón tres veces de la liga, una de la FA Cup y de la Copa de la Liga, y en dos ocasiones de la Community Shield. En cuanto a los torneos internacionales llegó a la final en seis ocasiones, siendo campeón dos veces de la Copa de Ferias (precursora de la Europa League)
Y sí, el conjunto de Yorkshire tiene muchísimos menos títulos que los de Manchester, pero es que el fútbol no es solo ser campeón -y menos en Inglaterra, donde es tan bien estructurado, y donde los partidos son tan igualados que un club de segunda, tercera y hasta cuarta división puede ganarle a uno de Premier en alguna Copa-
El fútbol no es solo invertir, derrochar dinero, y tener a los mejores jugadores en tu equipo. El fútbol es también luchar, es pelear con lo que se tiene en las manos, no con la ayuda de algún grupo económico que de impulso. El fútbol no es crear un equipo un día y que en 11 años ya esté peleando por liga y hasta por campeonato continental -caso del Leipzig, propiedad de Red Bull- que si bien tiene talento, tiene un estilo de juego, pero no ha luchado como lo han hecho otros para ganarse un puesto y el respeto de los demás equipos -basta con buscar en internet el caso del Barrow AFC, el club que se financia vendiendo mermelada y que fue fundando hace más de 100 años, en 1901- Eso es el fútbol, y es la diferencia de un club histórico y uno grande.
