La final de la Eurocopa Femenina 2025 pone frente a frente a Inglaterra y España, finalistas en la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2023 y protagonistas de una rivalidad creciente.
- El domingo 27 de julio concluye la Eurocopa Femenina 2025
- Inglaterra defenderá el título, mientras España va por el primero
- Con importantes líderes generacionales de cada lado, ambas buscan hacer historia
La historia no terminó en Sídney, cuando un zurdazo cruzado de Olga Carmona batió a Mary Earps para ganar la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2023™. Esta vez, el escenario es la Eurocopa, de camino a la Copa Mundial Femenina de la FIFA Brasil 2027™. Aunque ambas llegan como vigentes campeonas, una de Europa y otra del mundo, las semifinales les exigieron hasta el último aliento.
“Es un poco surrealista”, dijo la directora técnica Sarina Wiegman tras vencer a Italia y conseguir el pase de Inglaterra a la final de la Eurocopa Femenina 2025. Aún sin conocer al rival que les disputará el título continental, Wiegman reconoció la hazaña de su equipo, que ha sobrevivido los últimos dos partidos más allá de los 90 minutos, con heroínas saliendo del banquillo, la juvenil Michelle Agyemang y la siempre confiable en momentos de urgencia, Chloe Kelly.
Aunque Wiegman se refería a las circunstancias del partido, el cierre del torneo poco tiene de surrealista. Inglaterra y España se han ganado este reencuentro con procesos que han elevado el nivel de sus futbolistas y han mantenido a sus selecciones en la cima. Las dirigidas por Montse Tomé también necesitaron 120 minutos para sellar su boleto frente a Alemania, pero lo hicieron exhibiendo la fortaleza de su plantilla con un golazo de Aitana Bonmatí, asistida por Athenea del Castillo, porque de ese lado también hay un buen elemento revulsivo.
Esta generación, con Alexia Putellas, Patri Guijarro y Aitana Bonmatí por España, y Lucy Bronze, Keira Walsh y Leah Williamson por Inglaterra, no solo escribe la historia de una rivalidad intensa, también establece un estándar. Ambas selecciones han construido entornos competitivos que favorecen el desarrollo de futbolistas con las herramientas técnicas y mentales para afrontar las grandes citas.
Desde aquel cruce en los cuartos de final de la Euro 2022 hasta la final de la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2023™, cada duelo ha sumado capítulos a una rivalidad joven pero trascendente. Inglaterra ganó en la prórroga en Brighton; España se cobró la revancha un año después en Sídney. Volvieron a enfrentarse en la presente edición de Liga de Naciones Femenina de la UEFA, y aunque Inglaterra ganó el primer duelo, España se quedó con el segundo para superarlas en el grupo y avanzar a la fase final.
Luego de Australia y Nueva Zelanda, los representativos han renovado varias zonas del campo y han encontrado en figuras jóvenes a próximas referentes. Una coincidencia es que dos jugadoras de menos de 25 años han tomado roles importantes.
En el caso de Inglaterra, la portería vivió un relevo tanto simbólico como real. Tras el sorpresivo retiro de Mary Earps, figura y líder en los últimos grandes torneos, Hannah Hampton asumió la titularidad. La presión no ha sido menor: las dudas persistentes sobre su capacidad, marcadas incluso por críticas personales desde su infancia, han puesto a prueba su temple. Pero Hampton, de 24 años, ha respondido con carácter. En los cuartos de final ante Suecia, sus dos atajadas en la tanda de penaltis sellaron el pase inglés a semifinales.
En España, la reincorporación de Claudia Pina, de 23 años, ha sido valiosa para el ataque con el atrevimiento y la confianza de quien atraviesa una gran temporada también con el Barcelona, hasta ahora ha marcado dos goles. «Somos una familia fuera del campo, todos, el staff y las jugadoras. Eso también hace que todo sea más fácil tanto si juegas como si no”, dijo recientemente en una entrevista para El País, destacando una de las claves.
Aunque el recuerdo de Sidney sigue vivo, en el vestidor inglés no quieren cargar con esa sombra. «Para nosotras, es un nuevo partido, un nuevo equipo, y sabemos lo que hemos estado mostrando en este torneo, así que vamos a seguir en esa línea y concentrarnos solo en lo positivo», dijo Keira Walsh a los medios antes de la final. «Obviamente lo piensas un poco, pero creemos que lo mejor es dejarlo a un lado y enfocarnos en el domingo. Tenemos muchas jugadoras nuevas en este equipo, que están seguras de sí mismas y aportan cosas distintas. Es emocionante poder centrarnos solo en eso.»
Las dos selecciones llegan impulsadas por una generación que ha aprendido a competir sin complejos, a ganar respeto dentro y fuera del campo. España busca su primer título continental. Inglaterra quiere defender el suyo. En Basilea se disputa algo más que una copa: el liderazgo del fútbol europeo.