Sin triunfos por ahora en la Liga y con un insípido presente en la Copa, el 2019-I sin duda será poco memorable para la hinchada cardenal
«Es un contrato indefinido», semanas atrás así señalaba el presidente cardenal Juan Andrés Carreño que sería el contrato de Gerardo Bedoya para ser el reemplazante del uruguayo Guillermo Sanguinetti, un contrato sin muchas clausulas ni ataduras, pero que, con las mismas palabras del presdiente, más especifícamente esa última, es una clara definición de lo que ha sido este 2019-I en Independiente Santa Fe, INDEFINIDO.
La tercera parte del campeonato culminó durante el último fin de semana y con ello la continua desilusión para los aficionados y el propio Santa Fe, que igualó, como dicen en el argot popular, de milagro gracias al gol de uno de los pocos jugadores que, durante los últimos encuentros, se ha dado cuenta de lo que está siendo la realidad cardenal, de ese momento que el equipo de sus amores atraviesa y es en la penumbra de un muy opaco semestre, que por el momento lo tiene en la posición 19 de la Liga con solo 10 puntos, sin haber podido ganar un solo partido, sí NI UNO, pero que, a pesar que su juego no convence, en la Copa es donde aún tiene una ligera luz de esperanza.
Hasta este momento, con estas 15 jornadas disputadas de la Liga Águila, esos 10 empates y las 5 caídas de Santa Fe, denotan lo que ha sido considerado por muchos como el peor semestre del cuadro rojo en mucho tiempo, sin duda alguna nefasto en varios aspectos y que con 5 fechas para terminar el campeonato, sumados a la gran responsabilidad que aún tienen en la Copa, parece que levantarlo de alguna manera no será más que un titánica tarea, que parece ser tendrá en estas semanas Gerardo Bedoya, que tuvo que tener el aval de sus jugadores básicamente para continuar con algo que parece perdido, esto previo a su partida, debido a la ya conocida llegada de Patricio Camps para la segunda mitad del año.
Entre acciones polémicas, según los miembros del club, rendimientos de jugadores a los que parece el equipo no les ha servido y donde no han podido demostrar lo que, al menos en el ideal, pensaban que podrían mostrar, sumado a unas decisiones polémicas de la dirigencia en aspectos como los técnicos y que hasta en la disciplina hubo fallos, son algunas de las características que quedarán ya para la historia sobre este primer semestre de 2019, donde además se firmó el peor registro sin victorias en una temporada, que hasta el momento va en 15 y contando.
Cosas por rescatar son muy pocas, quizás la oportunidad que últimamente se le ha brindado a miembros de la cantera, casos Dylan Borrero, Camilo Charria y continuar el proceso con algunos como Jhon Miranda, Edwin Herrera o Juan Sebastián Pedroza, son algunos de los pocos «logros» que han estado presentes durante el semestre, ese mismo que aún no llega a su final, pero practicamente deja a un león herido, bastante mermado en diversos aspectos y que tendrá que tener presente que esto debe ser una fuerte lección, principalmente para algunos jugadores (sabiendo que habrá una gran barrida), directivos y, sobre todo, para un cuerpo técnico venidero que ya tiene acordado, al parecer, uno de esos famosos proyectos.