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El Campín. ¿Fútbol y conciertos? Un escenario para vetusto para Bogotá

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Foto: Diego Santacruz

El debate sobre el estadio de los últimos días se debe a la apretada agenda de la Liga Colombiana y una pésima organización de Ocesa que trajo a una estrella mundial como Dua Lipa a un parqueadero (en 2016 Maroon 5 se presentó en el mismo lugar) y no quiere repetir el mismo error con Harry Styles.

-Historia- 

El Estadio Nemesio Camacho El Campín fue inaugurado el 15 de agosto de 1938; a las diez de la mañana, Eduardo Santos y Gustavo Santos, presidente y alcalde de Bogotá respectivamente, junto a los clubes deportivos, la junta de los Juegos Bolivarianos y miembros del Comité Olímpico Colombiano inauguraron al estadio.
El estadio es conocido como El Campín y debe su nombre al lugar donde se ubicó, La Hacienda El Campín, que era un lote ubicado al occidente de chapinero y que pertenecía a la familia de Luis Camacho Matiz, en ese momento concejal de Bogotá y quien fue convencido por Alberto Nariño Cheyne (Pionero del Comité Olímpico Colombiano) de donar el terreno para la construcción de un estadio, la familia Camacho aceptó con la única condición que el escenario deportivo de los Bogotanos llevaría el nombre de su padre, Nemesio Camacho.
El estadio nació para conmemorar los 400 años de la ciudad y al mismo tiempo ser la sede de los primeros Juegos Bolivarianos de la historia, de la mano de Nariño Cheyne y Jorge Eliécer Gaitán, alcalde de ese momento en Bogotá, se creó el estadio acorde a la ciudad, ya que el único escenario deportivo que tenía, era el estadio de la Universidad Nacional que no era apropiado para las justas bolivarianas.

Luis Eduardo Mora fue el encargado de diseñar el estadio, el cual contó inicialmente con nueve tribunas y una capacidad general para 23.500 espectadores. En 1968, tras una nueva remodelación y ampliación, se habilitó su capacidad oficial para 62.500 espectadores pero tras varias remodelaciones en varias décadas y siendo la última para el Mundial Sub20 de 2011, el aforo se redujo al actual que de 36. 343 espectadores sin poder utilizar las tribunas bajas de norte y sur para partidos de fútbol.

Fútbol y música pueden compartir escenarios y Bogotá no puede ser la excepción.

El fútbol y la música han ido de la mano desde siempre, músicos dueños de equipos y equipos que han acogido canciones como propias muestran la relación cercana pero el ‘templo’ para algunos aficionados al fútbol es a su vez el lugar de ver a los mejores artistas del mundo presentarse y muchos de ellos como AC/DC, Coldplay o Rolling Stones que tienen shows preparados solo y exclusivamente para estadios de fútbol han dado cátedra de calidad musical en estadios como Wembley, Antiguo Vicente Calderón y Bernabeu en Madrid, El Monumental en Buenos Aires el mítico Maracaná en Brasil y obviamente El Campín no podía ser la excepción. El estadio de Bogotá no puede ser exclusivamente para fútbol ya que se perdería cultura y espectáculo al cerrarle la posibilidad a muchos artistas de presentarse en la capital. Algunos privados han dado lugar a la creación de nuevos escenarios como el Coliseo Live y otros han unido esfuerzos para reformar los escenarios de la ciudad a través de APP (Alianzas público privadas) como el Movistar Arena pero algunos otros privados prefieren rentabilizar el concierto en lugares no adecuados para tener unas mejores ganancias y estas no vuelven a ser redistribuidas para la mejora de escenarios y/o shows.

Ocesa y el culpable del debate- Una tragedia anunciada. 

La organizadora de conciertos, Ocesa, es la única culpable del debate entre Dimayor, equipos de fútbol y alcaldia al tener una pésima planeación de los espectáculos y conciertos que impulsan. Muchos bandas y artistas se han presentado en lugares en diferentes a un estadio y no está nada mal, los grandes festivales musicales han llevado a que sea necesario lugares amplios y al aire libre, pero siempre dándole prioridad a la calidad del espectáculo y shows que para Ocesa no han parecido tener toda su atención pues en 2016, Maroon 5 se presentó allí y es solo por nombrar un artista de varios que han llegado para presentarte ante su público en ese lugar que no es el más acorde y lo que esperan los espectadores y el último concierto de Dua Lipa desató la furia de fanáticos y personas ajenas a la artistas por la mala organización y que vislumbra lo que podría pasar con Harry Styles.
One Direction fue todo un fenómeno a nivel mundial y su fanaticada es inmensa, esto logro que muchisimas personas luego de la separación de la banda, sus fans siguieran a sus integrantes por separado, como es el caso de Harry Styles.  Increible que Ocesa, los organizadores, aún sabiendo la importancia del artista, cancelaron la reserva que tenian para realizar el concierto en el parque Simón Bolívar, según dijo Blanca Durán, directora del IDRD en entrevista con la W-Radio, debido a esto se decidió realizar Rock al Parque ese fin de semana que se presentará el cantante y actor británico, decidiendo realizar el show en el parqueadero del Salitre Magico.

No hay más fechas para fútbol ni escenarios para el artista. 

El problema del concierto de Harry Styles que está presupuestado para el 27 de Noviembre y el debate que ha llevado consigo se debe primero a que el estadio El Campín por decreto, es un escenario deportivo con prioridad para el fútbol, es así que para realizar un concierto, se deben reservar con antelación para que la Dimayor pueda organizar en otras fechas y 5 días después de terminados los conciertos (lo que dura el desmonte del escenario y demás pormenores) los partidos de fútbol de los dos equipos de la capital. El primer inconveniente está en el apretado calendario de fútbol, ya que no hay días disponibles por que hay muchísimos partidos aún por disputar y con la Copa del Mundo está a la vuelta de la esquina (Comienza el 20 de noviembre) lo que hace imposible que se reprogramen los partidos y más siendo estos en fases finales y haciendo más difícil que se pueda llevar el fútbol (que tiene prioridad) a otros escenarios.
El segundo inconveniente tiene que ver con la realización de un concierto para esas fechas en el estadio El Campín. Bad Bunny tiene reservadas la fecha del 20 de Noviembre en el estadio pero tardan 7 días en poder realizar todos los ajustes para tener el escenario acorde y más de 7-8 días para el desmonte, lo que hace imposible que Harry Styles este en el mismo estadio y más siendo organizaciones completamente diferentes, ya que el promotor del reggaetonero es Diomar Garcia Eventos y del británico es Ocesa. Además sumado a ello y como tercer factor, no hay más escenarios disponibles, y es que esa misma fecha el Parque Simón Bolívar recibirá Rock Al Parque, el evento de rock gratuito más grande de Latinoamérica. En el Movistar Arena, el 26 de noviembre se presentará Camilo en su tour.

La Falta de estadios es por el poco intereses de los equipos de fútbol

Un gran problema han tenido las ciudades del país para atraer espectáculos y show en los estadios debido a lo vetustos y viejos que se encuentran los escenarios deportivos y en especial los estadios de fútbol. Para no ir tan lejos y a diferencia de Ecuador, donde sus equipos en gran mayoría cuentan con estadios propios que están adaptados a las necesidades de hoy en día y se convierten en escenarios multi propósitos para recibir los conciertos y los partidos y así poder ir cubriendo costos de la inversión a la largo plazo. Pero el problema en los equipos Bogotanos ha sido el POT y a la vez la negligencia y poco intereses de los dirigentes en construir un estadio con una marca aliada como hacen los demás equipos en el mundo y generando ingresos hasta en la venta del nombre del estadio para generar mayores ganancias pero lastimosamente el fútbol es privado para que los presidentes de equipos pequeños compren camionetas de último modelo o paseen por los mejores lugares del mundo a costa de la Federación y Dimayor, no hay un interese en el crecimiento del deporte que va de la mano del crecimiento económico y cultural como nación.