Después de un semestre en el que ningún conjunto bogotano logró clasificar al octagonal final, los tres equipos de la segunda división quisieron renovar aires.
Tigres busca regresar lo más pronto a la primera división, después de estar en el 2017, los felinos vendieron más de lo que pudieron traer y pagaron caro. La pasada temporada no alcanzaron una buena regularidad y dejaron ir puntos importantes en casa. Para este año desvincularon a 11 jugadores del plantel profesional.
La baja más sensible podría ser la de el entrenador John Jairo Bodmer, que se va tras casi una década en la institución rumbo a Jaguares de Córdoba, donde comenzó con pie derecho la Liga. En su remplazo estuvo el técnico encargado Diego Díaz que hace unas semanas fue ratificado como nuevo timonel. El objetivo del equipo será retornar a la A.
Fortaleza fue el otro equipo que no tuvo un buen inicio de semestre, y pese a mejorar su rendimiento en las últimas fechas no le alcanzó para llegar a los ocho. El equipo con sede en Cota, al norte de la capital, jugó por primera vez en este municipio y al parecer le quedó gustando, ya está confirmado que para este año volverá a ser su casa.
Al mando seguirá el profesor Carlos Barato, que también hace parte de la junta directiva. Fortaleza busca darle continuidad al plantel ya que se han dado solamente cinco salidas oficiales y están en duda la continuidad de un par de futbolistas. No hizo una gran incorporación pese a que se reforzó con jóvenes jugadores que vienen a potenciar el equipo.
Por último está Bogotá Fútbol Club que lleva dos años sin alcanzar el grupo de los ocho, objetivo al que quieren apuntar está temporada. Para ello vincularon este semestre a un experimentado del fútbol colombiano, Jairo “El Viejo” Patiño es el nuevo DT de los capitalinos.
La institución siempre a priorizado mostrar y apostar por jugadores de su cantera, jóvenes que quieren juntar con algunos experimentados. Deberán encontrar el remplazo de sus dos capitanes la temporada pasada, Esteban Morales y Néstor Asprilla, también evidenciando la idea del equipo que es darle ruedo a jugadores y poder vender, no retenerlos.
Con este panorama la acción en la primera B promete mucho, por lo menos se espera con contar con alguno de estos equipos siendo protagonista y entrando en los primeros clasificados, para así volver a tener cuatro capitalinos en la A.