En un apasionante Gran Premio de Gran Bretaña, Lewis Hamilton se llevó su séptima victoria en el circuito de Silverstone. El piloto inglés ganó la carrera que tuvo un desenlace dramático en las últimas dos vueltas.
La carrera transcurría con normalidad, pocos percances y con los dos Mercedes a la cabeza, Lewis Hamilton y Valtteri Bottas controlando los tiempos y marcando los registros sobre el asfalto, por detrás de ellos iba Max Verstappen, el joven piloto neerlandés que no lograba tomar el ritmo que traían los Mercedes, y en la cuarta casilla estaba Charles Leclerc, el Ferrari que buscaba una gran carrera tras la mala actuación de Vettel.
49 de las 52 vueltas de la carrera habían transcurrido y todo seguía igual en la clasificación, pero pasaría algo insólito que casi cambia por completo el trámite del Gran Premio. El coche de Valtteri Bottas tenía un gran desgaste en sus neumáticos y Max Verstappen aceleraba el ritmo para quitarle la posición. El Mercedes reventó una llanta y tuvo que entrar a Boxes de manera inmediata, saliendo en la posición número 12, perdiendo 10 puestos. La disputa por el podio quedaba entre Verstappen, Leclerc y Sainz, Hamilton era prácticamente inalcanzable.
Carlos Sainz empezaba a sentir fallas en su auto, las vibraciones no paraban y algo malo estaba pasando, pocos minutos después, sufrió un pinchazo y quedó relegado del podio tras hacer una estupenda carrera en Gran Bretaña. El GP quedaba en manos de Hamilton, Verstappen y Leclerc.
En la última vuelta, Lewis Hamilton también reventó su neumático y no tenía tiempo de entrar a Boxes, los 19 segundos que tenía sobre Verstappen se vieron seriamente afectados, así que decidió sacar sus dotes que lo catalogan como el mejor piloto del mundo en la actualidad y terminar la carrera con solo 3 neumáticos. En Red Bull tomaron la decisión de que Max entrara a Boxes para cambiar llantas y buscar el récord de vuelta, decisión que les costó la primera victoria del equipo en el año.
Los últimos segundos de carrera fueron realmente emocionantes, Hamilton con 3 ruedas y Verstappen acelerando por alcanzarlo. Los 19 segundos de ventaja pasaron a ser 10, y cada vez eran menos. Al piloto de Mercedes le avisaban que se acercaba el Red Bull cada vez más, finalmente, Hamilton se llevó la victoria con 3 neumáticos en su coche y solo 5 segundos de ventaja sobre Max, que si no hubiera parado, habría sido el ganador en Silverstone.
El impacto que causó el pinchazo de Hamilton, dejó a todo el mundo en shock en Silverstone. El piloto estuvo a nada de abandonar de carrera, pero maniobró el monoplaza de manera excepcional para no sólo culminar el circuito, también para tener una de las victorias más sufridas de su carrera, según declaró el mismo Lewis “Tenía que pisar el acelerador. Nunca he experimentado nada así en la última vuelta. Casi se me para el corazón”.
Finalmente, los 3 pilotos del podio caminaron hacia la premiación juntos, hablando de la increíble definición de la carrera y sin poder creer lo que había pasado en las dos últimas vueltas. Sin duda alguna, uno de los mejores finales de la Fórmula 1 en la actualidad. Pese a la ausencia del público en Silverstone, las emociones estuvieron a tope y con las mejores maniobras de pilotaje en acción.
